CASA MIGRANTE: UNA RESPUESTA COLECTIVA ACERCA DE LAS MIGRACIONES EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES

Resumen

Argentina en el año 2003 sanciona la Ley N°25.871 que establece la igualdad de derechos a personas nacionales y no nacionales. Esta ley marcó un cambio de paradigma sobre la democracia, las migraciones y la ciudadanía.

Las organizaciones comunitarias aportan a construir una cultura de derechos humanos de las personas migrantes. Villarreal Villamar (2018) resalta el papel de las organizaciones de migrantes, de los organismos de Derechos Humanos y de la academia como fundamental en el afán de visibilizar y luchar para revertir los mecanismos de discriminación y restricción de la movilidad humana.

Según la OIM (2009) el contexto actual se caracteriza por flujos migratorios complejos y mixtos, dado que las circunstancias políticas, económicas y sociales empujan a las personas a migrar de sus países de origen, en algunos casos de manera irregular. Enfrentan grandes dificultades para establecerse, trabajar y desarrollar un proyecto de vida.

El objetivo de este trabajo es visibilizar la experiencia de Casa Migrante como espacio de encuentro intercultural para acercar derechos a las personas migrantes. Situada en el barrio de Balvanera (Once) brinda asesoramiento jurídico a fin acceder a la regulación migratoria. Este primer derecho permite el ejercicio de los derechos de educación, salud, vivienda, con especial atención a las infancias.

Para ello, se realizó una etnografía sobre la experiencia de esta organización migrante, basada en entrevistas semiestructuradas, observación participante en las actividades y registro audiovisual, también del barrio que se caracteriza por su diversidad cultural en las últimas décadas. Como lugar de llegada, acogida, tránsito, y destino. La gastronomía, los eventos, y lo que cada persona aporta en cada lugar enriquece la cultura del conjunto brindando una oportunidad para intercambiar y desarrollar competencias interculturales.

Casa Migrante es una organización comunitaria construida por y para las personas migrantes. Su meta es ser un puente de acceso a los derechos de las personas que llegan al país, transitan o residen en la ciudad de Buenos Aires. “Ninguna persona es ilegal” puede leerse en las paredes y vidrieras del lugar.

Según, la Dirección Nacional de Migraciones entre el año 2004 y 2023 se solicitaron 3.033.786 radicaciones[1] La perspectiva de ampliar derechos, de empoderamiento de las personas es una práctica democrática que llama a la reflexión, es una invitación a nutrirse de la diversidad social y cultural de América Latina y del mundo.

Como resultado de esta investigación se realizó, desde un abordaje comunitario de la comunicación, una pieza audiovisual de un minuto que destaca a la organización Casa Migrante como espacio de encuentro de migrantes provenientes de Paraguay, Bolivia, Perú, Venezuela, Colombia, de países africanos, y de países con conflictos bélicos actuales como Rusia y Ucrania.

Las reflexiones finales giran al aporte de la Casa Migrante como espacio de encuentro y diálogo intercultural en que las distintas comunidades migrantes comparten, se vinculan, se apoyan, se  cooperativizan y regularizan su permanencia.

[1] Fuente: Renaper. Segundo Informe Nacional sobre Avance de Implementación del Consenso de Montevideo sobre Población y Desarrollo (Marzo, 2023).